Marie Fredriksson en las Grandes Biografías de Zafarrancho Vilima

Zafarrancho Vilima - Un pódcast de Zafarrancho Vilima

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Hoy conoceremos la tormentosa vida de la vocalista de Roxette, Gun-Marie Fredriksson, que tiene apellido de móvil con tapita. La pequeña Marie nació el 5 de mayo de 1958 en Össjö (eójja), un pueblecito con muchos alces, osos, linces, tigres siberianos y leopardo de las nieves, que los niños allí en vez de maiz pa las palomas, llevan solomillos de dos kilos. De familia muy humilde, Marie era la más pequeña de 5 hermanos: Inga-Stina, Anna-Lisa, Ulla-Britt y Sven-Arne, pero no puedo asegurar sin son los nombres de los niños, de las mascotas o de las herramientas que se compró el padre en el Aldi. Sus padres fueron Inez Dagmar Hoffer, granjera y hastarpapo de tó, y Charles Gösta Fredriksson, granjero que se bebía hasta el ron Almirante del Mercadona. Marie le tenía más miedo al padre que Espartaco Santoni al “que hable ahora o calle para siempre” de las bodas a las que iba. En 1962, cuando Marie tenía 4 años, una “mala racha económica” (“Me bebo hasta el vino del IKEA” en sueco) hizo perder a la familia la granja que administraba su padre. Así que tuvieron que mudarse a Östra Ljungby (Ostra Junbí). Su madre encontró trabajo en una fábrica a unos pocos km, porque no la había más lejos, y su padre encontró trabajo de cartero y se llevaba a Marie al trabajo, porque alguien tenía que repartir las cartas. Cuando tenía 7 años, su hermana mayor hizo con el coche un James Dean, que llegaron los dientes a San Petersburgo. Esta tragedia la marcó mucho, pero por suerte al padre le gustaba cantar y eso despertó en una pequeña Marie la curiosidad por la música, el ibuprofeno de las penas. A los 8 años formó su primera banda en el colegio usando un pito de sereno, una olla, y un gato mosqueao que hacía de Yoko ONO. Al padre le dio pena y le alquiló un piano, cosa que agradeció mucho el vecino de abajo. Luego le compró un piano al que le faltaban algunas octavas de la marca Schimmel, que eso costaba como una tableta de turrón de chocolate Suchard. Lo de que le faltaran las octavas la ayudó a aprender de oído. Eso y que tenía talento, que a mí me ponen un piano afinao y yo como mucho, me hago un selfie. Marie sufrió bullying en el colegio, que había que asegurar una infancia de mierda para ser una gran estrella. Así que cuando tenía 17 años se fue a estudiar música a la Universidad Fridhem de Svalöv (Frídemdosvalóf). Allí su novio le presentó a Per Gessle y de ahí al éxito el camino se llamó Roxette, que estuvieron 33 años cotizando. En 1984 se casó con el cantante sueco Mikael Bolyos (Míkael Boliós) con quien tuvo dos hijos y que estuvo a su lado en los momentos más duros, incluso cuando movía el edredón después de peerse. En esta época ya tenía el pelo como el rubio de Locomía, tenía los hombros como Demi Moore en la Teniene O´Neal y las paletas que ahí no le cabía un paluego, le cabía un “palasemanaqueviene”, que se arregló ya de mayó con un poquito de Pegoland. Durante un tiempo, Marie se sintió un poco sobrepasada por el éxito, pero es que la gachí no dejaba ná pa nadie, cantaba en solitario, cantaba en Roxette, hacía giras con uno, con otro, que parecía que le habían dicho que tenía que trabajar hasta los 67. El 11 de septiembre de 2002, a Marié le dio un escalofrío cuando se estaba duchando y se resbaló, golpeándose tan fuerte en la cabeza con el borde del bidé, que se le quedó el cráneo como una plantilla de los ríos de España con tó sus afluentes. La llevaron corriendo a la clínica Quirón, pero como allí no cogían a los de Adeslas, se tuvieron que ir al Virgen del Rocío, y menos mal, porque lo de menos fue la brecha, debajo del casco tenía un “quiste” como una cuña de chocolate. Pero los médicos fueron mu profesionales, se lo rasparon como si se estuvieran comiendo un buey de mar y luego le echaron una mihita de Sanitol pa asegurarse. Marie perdió la capacidad de leer y cantar, por lo que tuvo que estar dos años a saco con el Micho. En 2007, que ya se encontraba ella más repuestita, regresó a los escenarios como solista y en 2011 con Roxette, empezando una gira mundial que duró hasta 2012. Ya estaba cogiendo carrerilla y en 2016 quería hacer otra gira mundial por el 30 aniversario del dúo, pero le dijeron los médico: “AMO A CALMARNO” Desgraciadamente, el 9 de diciembre de 2019, con 61 años, Gun-Marie Fredriksson se quedó durmiendo en su coche, aunque ustedes siempre podrán recordarla cada vez que se crucen con un gato mosqueado que canta como Yoko Ono o vean el precio del turrón de chocolate Suchard.