Carl Weathers en Las Grandes Biografías de Zafarrancho Vilima

Zafarrancho Vilima - Un pódcast de Zafarrancho Vilima

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Hoy rascaremos para sacar a relucir los acontecimientos más importantes de la vida de Carl Weathers, que por el nombre ya se pueden bajar en el “quién es quién” a los blancos y a los asiáticos. Hoy recordaremos a Apollo Creed. El pequeño Carl nació entre algodones el 14 de enero de 1948 en Nueva Orleans, donde los afroestadounidenses todavía no podían votar y no podrían hasta 1960. Desde chiquitito se veía que el niño iba a tener los brazos como los de los concursos de las guantás, los abdominales como los dientes de una excavadora y el mandao que tu lo mirabas de lejos y parecía que estaba buscando agua pa hacer un pozo. Vamos, que si llega a nacer en la época esclavista estaba claro que su futuro iba a ser estár todo el tiempo en el cuarto de la Señora En 1966 se gradúa en el Instituto y lo mandan a la Universidad de estatal de San Diego, que por lo visto eso era como entrar en la cantera del Barça. Allí se hizo jugador del football americano profesional, en la posición de “linebaker”, una especie de apoyo de la defensa. Vamos, el que te quita el balón mirándote como tu madre cuando está enfadá y hay gente delante. En 1970, cuando todavía le quedaban todas las troncales de tercero y 3 obligatorias de primero, fue fichado por el Oakland Riders. Al año siguiente se pasó al BC Lions de la liga canadiense hasta 1973 y, claro, ya con el cambio al plan bolonia y la asistencia obligatoria no se pudo sacar la carrera, porque por lo visto allí sólo se la regalan a los deportistas que cuando les da mucho el sol cogen color Lambrusco. En 1974 dejó el deporte para dedicarse por completo a su verdadera vocación, la petanca, pero como de la petanca no se puede vivir, se dedicó a la actuación. En 1975 debutó en la pequeña pantalla, en algunas series de éxito como “Kunf fú”, interpretando en un capítulo a Sam “el malo”, un cazarrecompensas que llevaba el cuchillo pa fileteá las pechugas de pollo de la madre. En 1973 se casó con su primera pareja, Mary Ann Castle (Ana Mari Castillo, en español) con quien tuvo a sus dos hijos, Mathew y Jason, y que fue la que inventó lo del negro del Whatsapp. Su gran oportunidad llegó en 1976 cuando le ofrecieron el papel de Apollo Creed, el malo de Rocky. En principio no querían probarlo porque lo consideraban un actor aficionado y en la entrevista fueron a cogerlo, porque como él sí sabía inglés, lo que le preguntaron es que si sabía boxear. Inmediatamente, Carl, con su 1,88, se puso a dar saltitos, puñetazos, que él había visto en la tele a Ruiz-Mateos, y a cubrirse como si la madre le hubiera tirao una babucha. Ante la cara dubitativa de los productores, Carl se quitó la camiseta y le dieron el papel de Apollo en Rocky, Rocky II, Rocky III y Rocky IV, que es donde su personaje muere dando mucha penita porque a partir de Rocky II, ya era su mejor amigo, como pasó en Terminator, pero enseñando más los pectorales. En 1983 la pareja se divorcia y se ve que el hombre no sabía poner la lavadora que al año siguiente se casó con Rhona Unsell con quien estuvo 22 años y de quien se separó en 2006, que después de tantos años quedaron de amigovios pa no abrirse un Badoo. En 1987 protagonizó junto a Arnold Schwarzenegger “Depredador” (“Jambrón” en español), que era un extraterrestre con rastas y con el aparato que te pone el dentista pa que no puedas cerrar la boca. Otras de las protagonistas era Elpidia Carrillo, que con ese nombre no me extraña que quisieran exterminarnos. En esta época tenía el bigote como la cococha de la Rhona recién recortaita, los músculos siempre muy brillantes y los abdominales un poquito maquillados, como los de 300, pero pa que no se vieran tan marcaos, que Stallone no se había desarrollo del tó todavía. Después de estos éxitos de pantalla estuvo alternando series y películas, como una que hizo de serie B que se aprovechó de su popularidad. Que estuviera Sharon Stone también en la película no influyó en nada para que aceptara el papel, es que se aprovecharon de él. En 2007 se casó con la productora de documentales Jennifer Petterson, pero el matrimonio duró como si Gonzalo hubiese sido el testigo. Su última aparición fue en la serie Mandalorian del universo Star Wars Carl también tenía la voz como los de los coros que aprietan el cuello pa’bajo cuando cantan, por lo que fue en muchas ocasiones actor de doblaje. Carl era el Constantino Romero de ellos. Además de todo esto, Carl fue miembro del Comité Olímpico de los Estados Unidos y de Big Brothers, una organización sin ánimo de lucro que ayuda a los niños a marcarse los abdominales y a desarrollar su potencial. Su última aparición fue en 2019 en la serie Mandalorian, en la encarnaba a Greef Karga gaditana, dónde contaba la anécdota del tío de la puerta y la marea plana. Desgraciadamente, el 1 de febrero de 2024, a los 76 años, el gran Apollo Creed se quedó dormido y se fue hacia la luz pa apagarla aunque ustedes siempre podrán recordarlo cada vez un americano al sol coja color Lambrusco o vean a alguien pegar un puñetazo como Ruiz-Mateos.