032624 — Otorgar Una Tregua

Un Minuto Con Dios - Un pódcast de Dr. Rolando D. Aguirre

La expresión "No hay tregua" se utiliza comúnmente para indicar que se ha agotado el tiempo o que no hay más oportunidades disponibles. También puede ser una advertencia sobre una última oportunidad en una batalla o una señal de que una relación, discusión o situación ha llegado a su fin. Sin embargo, ¿qué pasaría si viviéramos nuestras vidas sin treguas? Sería insostenible, ya que la vida está llena de oportunidades y momentos de respiro. De hecho, la Biblia nos enseña que la misericordia de Dios se renueva cada mañana, lo que significa que siempre hay una oportunidad fresca disponible a través de Él. Dios es el Dios de las segundas oportunidades y siempre está dispuesto a brindar tregua a aquellos que se acercan a Él con sinceridad. Entonces, si Dios nos ofrece tregua, ¿por qué nos resulta tan difícil otorgarla a los demás? Nuestra propia naturaleza egoísta y pecaminosa a menudo nos impide perdonar y ofrecer una tregua a quienes nos rodean. Sin embargo, recordemos que hemos sido perdonados por gracia y debemos extender esa misma gracia a los demás. Así que, hoy, consideremos otorgar la tregua que otros tanto necesitan de nosotros. La Biblia dice en Proverbios 17:9, “Cuando se perdona una falta, el amor florece, pero mantenerla presente separa a los amigos íntimos” (NTV).