Los 13 Mitos sobre ganar dinero en internet
Te Invito un Café | Desarrollo personal, Psicología y Salud Mental - Un pódcast de Robert Sasuke
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Desde el momento en que me enteré que podía ganar dinero en internet comencé a hacerlo, estoy hablando del año 2003 cuando una compañía llamada Blogger te permitía crear tu blog gratuito. Ahí me di cuenta de lo interesante del internet, un espacio donde puedes convertirte en autor. Y lo primero que hice fue comenzar a vaciar en mi primer blog (que se llamó psiberlogía.net) los apuntes que tomaba de las clases de psicología. Me di cuenta de las posibilidades que comenzaba a brindar el internet, y en el año 2008 decidí abrir junto a Jeymi y dos colegas más una revista de psicología, que se llamó psicologíadominicana.net y ese proyecto se convirtió en negocio. Estuvimos cuatro años haciendo muchas cosas interesantes, aprendiendo muchísimo sobre negocios en internet hasta que decidimos cerrarlo y hacer marca personal. Y no hemos parado hasta la fecha de emprender. Hemos dado algunos giros en diferentes temáticas y el tiempo, la experiencia, las subidas y las bajadas me han hecho confirmar que vale la pena seguir. Es algo que podemos hacer hasta viejitos porque lo podemos hacer con con computadores y vale la pena. Sin embargo, muchas personas tienen el interés o me escuchan a mí hablando sobre negocios en internet, sobre emprendimientos, sobre mis proyectos, y se lo encuentran extraño porque todavía piensan que trabajo es sinónimo de ir a una oficina de 8 a 5 a sentarse y que lo demás no es trabajo. Todavía hay personas que piensan que eso de generar ingresos en internet es mentira o es un engaño: absolutamente, erróneo. Por tanto hoy he recopilado una serie de mitos sobre generar dinero en internet a través de negocios, de forma lícita que muchas personas tienen, muchas ideas distorsionadas sobre esto para que puedan aterrizar, para poderles decir cuál es la verdad sobre esto. No olvides suscribirte al podcast para aprovechar todos sus beneficios y escuchar este episodio completo. ¡Nos vemos dentro!