Marcos 4, 26-34: No todo es ¡ya!
Reflexión diaria del Evangelio por el P. Luis Zazano - Un pódcast de Misioneros Digitales Católicos
Categorías:
1) Los procesos: Algo que te tiene que quedar en claro, y lo vemos muy bien en el evangelio de hoy, es que la vida es un proceso. Por ende, vos no cambias de un día para el otro, no pasas de una cosa a otra de un día para el otro. Las cosas de tu vida son como un camino y un proceso con el que vas luchando día a día. Por ejemplo, una persona adicta tiene que trabajar día a día. Pero esto es en todos los ámbitos de tu vida. Incluso en tu vida de oración y tu espiritualidad, es de a poco y despacio. Hay veces que la ansiedad nos gana y queremos lograrlo todo ya. Esa será tu mayor lucha, porque irás viviendo metas dentro de este proceso, para lograr ese objetivo. Acordate que el objetivo es lo final y las metas son los procesos que te vas poniendo. Tu vida es un proceso, las cosas no cambian de golpe, asumilo. Las personas tampoco cambian de golpe. Si te dijo que quiere cambiar, acompáñalo, ayúdala.. pero recordá que es un proceso y no todo se logra de golpe. 2) Lo pequeño: Es bueno que si querés cambiar comiences con lo pequeño, pequeñas acciones, actitudes, que llevan a hacer luego mucho. Aprender a valorar y respetar el tiempo es fundamental. Tus pequeños logros con el tiempo se van a convertir en grandes batallas logradas. Me viene el ejemplo del que hace dieta: el que hoy no hayas comido chocolate logrará en unos días tener el resultado de haber bajado unos gramos, y dentro de unos días más esos gramos darán el resultado de un kilo o unos kilos bajados. Pero comenzó con algo concreto y pequeño, como “privarse de comer algo tan simple pero también tan complicado (para los que nos gusta) como el chocolate”. Por eso, si querés iniciar cambios en tu vida, comienza con pequeñeces. 3) Don Bosco: En él vemos en primer lugar un proceso interno con “su carácter”, pues hasta en algún momento se fue a las manos con alguien… Cómo será que trabajará este tema con su director espiritual, y hasta pone el nombre “salesianos” a su congregación en encomienda a San Francisco de Sales (ya que es el patrono del buen carácter). ¿Ves? Las cosas no se logran de un día para el otro. El otro proceso es externo que tiene Don Bosco comenzó con algo tan pequeño como su oratorio. Que luego vemos hoy que los salesianos se extendieron por todo el mundo y hasta Dios le encomendó a Don Bosco, en un sueño, la Patagonia (Argentina). Porque la vida, para llegar a la felicidad, es un proceso, pero se inicia teniendo en claro qué es lo que quiero y la voluntad de Dioa. Se comienza con poco y se llega a mucho, pero despacio, porque la vida no es para arrebatados, sino para valientes que trabajan día a día por lo que quieren, con paciencia y esforzándose por tener buen carácter. Algo bueno está por venir.