Vuelan las Plumas - Pilar Hurtado y Luisa Rivera: El comedor de la abuela
Radio Universidad de Chile - Un pódcast de Radio Universidad de Chile - Miercoles

“Nueve sillas heredó mi abuela. Habían sido de la madre de su madre, y todos en la familia nos sentábamos allí, en su comedor, a disfrutar de los manjares que sus manos preparaban cada domingo…”. Es su primer libro para niños y está feliz. La reconocida periodista gastronómica Pilar Hurtado, conocida como @lacomensala, cuenta que la historia “le salió de un tirón” y que tiene que ver con su propia historia. “El comedor de la abuela” está inspirado en los almuerzos familiares de los domingos en casa de su abuela Josefina, quien era una gran cocinera. Su mirada, desde “la mesa del pellejo” o la mesa de los niños le hacía intuir que lo que les pasaba a los adultos era diferente de lo que sentían ellos cuando probaban platos exóticos, como los erizos. Y es que, desde la mirada infantil, no comprendían el efecto placentero que causan en los mayores los manjares que cocinaba la matriarca de la casa. Con el tiempo descubrirán que su comida tiene la capacidad de llevarles mentalmente en el espacio e incluso hacerles perder la noción del tiempo. Desde la fideuá del Mediterráneo o el ceviche de Perú, hasta el pollo al curry de la India o las enchiladas mexicanas, pasando por el ramen de Japón o el risotto italiano, entre otras especialidades culinarias. Un libro que resalta el valor de reunirse y compartir en torno a la mesa; el acto de comer como una experiencia para disfrutar. Un glosario final explica aspectos informativos sobre las elaboraciones, anécdotas o variedades de cada receta. Para la ilustradora chilena Luisa Rivera, el texto la condujo también a su propia infancia, criada en un hogar donde sus propios padres eran sommeliers y donde la comida tenía un papel central. El texto de Pilar Hurtado, que literariamente remite al realismo mágico, marida con las ilustraciones de Luisa Rivera: sus tonos cálidos nos remiten a la cercanía del hogar, en torno al colorido de los ingredientes, y sus paisajes -con sorprendentes metáforas visuales- son escenarios intensamente vívidos.