#172. A las pruebas me remito… en oposiciones.

Hoy estoy enfadado. De verdad. Seguimos encontrando sentencias dadas por "catedráticos" de la experiencia (sí, esos de la universidad de la vida) que han logrado algo, y cuentan la película. El problema es doble. Por un lado cuentan no "la" película. Cuentan "su" película. Y de todos es sabido que esta película acaba reescribiendo los recuerdos. Y por otro lado, la gente se la cree. Todo esto parece que no tiene que ver con oposiciones. Pero tiene que ver y mucho. Si haces un poco de memoria, seguro que hay muchas personas que te han dado una opinión acerca de qué, cómo o si deberías estudiar una oposición. Desde aquellas personas de "no se para que estudias... yo prefiero vivir la vida" (creo que esta me la apunto para un episodio de frases que entorpecen el estudio). Hasta aquellas que dicen "bueno, yo me estudié este tema y quedé la número 1". Si hay que tomar decisiones, por favor, recomiendo tomarlas sobre personas con una capacidad probada. Yo no le haría caso al primero que pase (por mucha plaza que haya sacado) y que me diga algo del tipo "yo solo me estudié la legislación, que es lo que más preguntan, y saqué plaza" pues esta frase tan genial, tan absolutamente cargada de experiencia, sabiduría y exactitud... vamos a someterla a prueba. Vamos a ver si esta persona tenía razón o no. Hoy un caso real para ver hasta qué punto debemos hacer caso a la gente... o no. Especialmente cuando nos dan soluciones baratas, rápidas y "sencillas". Y, claro, siempre desde la base de que ellos son seres superiores en el estudio. Eso que vaya por delante. Si tú estudias, es porque te hace falta. (esto es una ironía que trato en otro episodio del podcast)