14 - ¡Dos ideas para mejorar tu vida sexual en pareja!

Mundo Khamira - Un pódcast de Victor García

En el programa 14 de nuestro podcast para parejas os traemos un nuevo concurso para conseguir nuestro libro erótico: "Atreverse o no atreverse" firmado por el autor. En el podcast podréis escuchar cuales son las bases para participar. Además hablamos sobre el mundo de los masajes tántricos, de sus beneficios y de cómo hacerlos, así como exponemos un tema personal sobre nuestra visión de ver el sexo. Hoy es miércoles de diciembre 16 de diciembre de 2015 y este es el programa número 14. Hoy os traemos un programa muy completo pero, adicionalmente, del tema principal del que vamos hablar hoy, vamos a explicar las bases de un nuevo concurso que vamos y, es importante destacar, que vamos a muy añadir un aporte extra que es algo por lo que luchamos siempre desde Mundo Khamira y que es un tema que ha surgido en mi cercanía y que quiero contar. Nuestro concurso de literatura erótica en el podcast para parejas de Khamira Vamos a comentaros lo del concurso de literatura erótica para todos los oyentes que quieran participar, tanto ellos como cualquier persona a la que ellos le recomienden nuestro podcast para parejas. Consiste en lo siguiente, vamos a colocar en nuestro Twitter: @MundoKhamira. Vamos a colocar en nuestro perfil, un tweet fijo, que se va a quedar colocado en la parte de arriba del perfil, con el hashtag #ConcursoLiterario en el que puedes participar y ganar mi libro titulado: Atreverse o no atreverse; firmado por el autor y en formato libro físico. Nos encargaremos de enviároslo sin coste adicional, por supuesto. Sin ningún tipo de coste. Lo único que tenéis que hacer es Retwittear ese tweet y el sorteo estará abierto hasta el día 24 de diciembre. El día 24 de diciembre, en nuestro programa especial, diremos el nombre de la ganadora o del ganador. De esta forma, así podrá llegarle para el 6 de enero. Repetimos cómo funciona el concurso, es muy sencillo. Tenéis que hacer Retweet, en el tweet que está fijado en la parte principal de nuestro Twitter. Una opinión personal sobre un tema delicado en nuestro podcast para parejas En la segunda parte del podcast para parejas, lo que vamos hacer ahora antes de entrar con el tema de hoy que va ser enfocado a los masajes tántricos, es comentar algo en relación a una experiencia personal y que es una de las cosas por las que luchamos en Khamira. Y eso por lo que luchamos es porque haya un mayor conocimiento más intrínseco de la sexualidad del hombre, por parte de la mujer, y de la mujer por parte del hombre. En este caso, hablaremos de un ejemplo muy concreto y, si estáis en contra o si no estáis de acuerdo con lo que exponemos, sois libres de comentar lo que queráis o darnos vuestra opinión para deliberar sobre este tema en el especial del día 24 de diciembre. ¡A ver qué opináis! Este es el caso, cuando una persona decide dedicarle un día o una noche o una tarde de placer a su pareja o a su amante, y le dice que le va a hacer disfrutar, os lanzo una pregunta. ¿Cómo creéis vosotros como creéis vosotros que le vas a dar más placer a la otra persona? ¿Haciendo lo que a ti te da la gana o haciendo lo que la otra persona quiere que le haga? Nosotros opinamos que es mejor la segunda opción. Si tú decides dedicar una noche o una tarde o una hora dándole placer a la otra persona, la mejor forma de hacerlo es haciendo lo que a esa persona más le gusta, no haciendo lo que a ti te venga en gana. Porque, a lo mejor, sobre todo si tú le dices alguien que vas a hacerle ver las estrellas, has de tener en cuenta que cada uno tiene sus gustos personales y si se imagina que le van a hacer algo que le gusta mucho y luego le hacen algo que no viene mucho a cuento, pues el placer que le vas a dar, no es el máximo posible. Pongamos un ejemplo todavía más práctico, en el caso de que una mujer le quiera hacer algo al hombre y ese hombre tenga en mente algo salvaje, que ella tome la iniciativa o que haga todo rápido, fogoso o con fuerza. Si ella, por mucho placer que le quiera dar, lo que hace es hacerlo todo muy, muy lento, muy tranquilo (no estamos diciendo que esto no sea positivo o sea placentero), lo que ocurrirá es que, al no ser lo que la otra persona quiere en ese momento, nunca vas a conseguir darle el máximo placer. Sólo queríamos comentar esto, nada más. Es nuestro punto de vista y sí queréis podéis comentarlo y darnos vuestra opinión. Ahora ya pasamos al tema de los masajes tántricos. Explicamos todo lo necesario para que des masajes tántricos, en nuestro podcast sobre sexología ¿Qué beneficios tienen los masajes tántricos? ¿Cómo hay que dar un masaje tántrico? ¿Sabes qué debes tener en cuenta a la hora de hacer un masaje tántrico? ¿Qué elementos usar y qué camino debes de seguir a la hora de hacer un masaje tántrico? Hoy en nuestro podcast para parejas hablamos sobre el masaje tántrico. Uno de los puntos a destacar sobre nuestros masajes tántricos es que no vamos a entrar a la parte teórica, por decirlo así, ya que esto puede ser un poco más aburrido. No hablaremos de sus orígenes y demás, sino que vamos a enfocarlo a lo real, a lo que una persona normal y corriente, es decir, tú y yo que no sabemos nada sobre los masajes tántricos. No vamos a entrar en sí creemos ciegamente o no en estas técnicas. Nos vamos a centrar en los amantes, en lo práctico. Vamos a comentar, lo primero, cuáles son los beneficios que tienen para ti y para mí, los masajes tántricos. Los masajes tántricos son sumamente relajantes, tienen la ventaja de que consigues disminuir el estrés que tienes, del que proviene del trabajo, de casa… Los masajes tántricos te ayudan a relajarte, calman los nervios, disipan tensiones y, al emplear tiempo en los masajes tántrico, consigues hacer un hueco en tu día en el cual te olvidas de todas las perturbaciones que tienes. Además, estimula los sentidos y te preparan para disfrutar más del sexo. Al igual que cualquier otro tipo de masaje, el masaje tántrico activa la circulación sanguínea y mejora la comunicación con tu pareja y tu conocimiento sobre el cuerpo de la otra persona. Esto es muy positivo porque, gracias a los masajes tántricos, aprenderás, en el futuro, a darle mayor placer a tu amante y a darle mejores orgasmos. ¿Qué más consideraciones hemos aportado en nuestro podcast para parejas sobre los masajes tántricos? Una de las cosas más importantes de los masajes tántricos es que, este tipo de masajes, es una de las mejores técnicas que sirven para innovar la cama, para llegar al orgasmo con más fuerza y para romper, un poco, con la rutina de tu vida sexual. Incluso los masajes tántricos son muy positivos para aquellas personas que tienen enfermedades de tipo sexual, para los que han tenido otros problemas como alguna lesión física, alguna cirugía e, incluso, sirve para que disfrutan aquellas personas que tienen enfermedades de transmisión sexual. Los masajes tántricos son una nueva forma de llegar al orgasmo, una forma muy placentera, muy positiva y que puede ayudar a aquellas parejas en las que un miembro tiene problemas a la hora de llegar al orgasmo o tiene disfunción eréctil. También mejora la autoestima ya que te sientes deseado o deseada, querida y amada. Como puedes ver, todos estos beneficios de los masajes tántricos van mucho más allá del mero sexo. Otro tipo de beneficio es que estas más preparado para llegar al sexo. Imagina algo similar al siguiente caso: A la mujer le gusta mucho tener preliminares, pues esto sería como si tuvieras unos preliminares mucho mayores. El punto fuerte de los preliminares es que estas preparando todo tu cuerpo para tener sexo, estas relajándote, estas desconectando tu mente y olvidándote de los problemas. Te estás enfocando sólo en las sensaciones que está sintiendo y eso es como una preparación muy positiva para llegar al orgasmo. De hecho, en función de tu situación personal y el momento en que te encuentres, el orgasmo puede ser más potente o menos en función de tus quebraderos de cabeza, de si tienes muchos líos, muchas preocupaciones, muchas tensiones… Que, además, muchas veces deparan en problemas a la hora de llegar al orgasmo, ya sea en la mujer o en el hombre. Por lo que, está claro que tu mente y su estado, influye directamente en cuanto se disfruta. ¡Pero aquí te contamos más beneficios de los masajes tántricos! También hay que tener en cuenta otra cosa, y es que mucha gente, cuando va tener sexo, su cabeza está pensando más en la otra persona y en dar placer, en si le gusta lo que le he hecho o no. En este caso, puedes desconectar de todo al 100%. Una persona sólo se tiene que encargar de recibir placer y la otra persona se tiene que centrar, al 100%, a dar placer. Así que esa preocupación de satisfacer a la otra desaparece porque ese momento está dedicando a sólo a ti, personalmente. De esta manera te concentras más en todo. Y tienes la posibilidad de tener un orgasmo mayor. ¿Cómo dar un buen masaje tántrico a tu pareja? Lo que tienes que tener en cuenta para llevar a cabo un buen masaje tántrico es que, el nivel más básico y sencillo, lo puede dar cualquier persona sin tener formación de masajista o de fisioterapia. Lo primero que hay que tener en cuenta la hora de dar un buen masaje tántrico, es toda la atmósfera que nos rodea. Todo lo que hay alrededor nuestra, lo que hay al exterior. Todo debe estar diseñado para que te embauque los sentidos. Por esto, esto significa que, principalmente, hay que cuidar el ambiente que te rodea. No puedes dar un masaje tántrico si estás en una habitación con los niños al lado, en el salón gritando, con la televisión a todo volumen o, por desgracia, si vives cerca de un aeropuerto… con el ruido de los aviones pasando por encima. O si vivieses en medio de la ciudad, con toda la gente gritando en la calle o tocando el claxon. El ambiente que rodea al masaje tántrico, ¿cómo arreglar la habitación? Así lo primero que hay que hacer es aislarnos de todos esos ruidos que nos rodean. La mejor forma para aislarnos del mundo exterior es con música, música relajante para masajes tántrico. Hay 100,000 tipos y están de forma gratuita en YouTube. Puedes encontrar música relajante que viene de Oriente Medio, Asia, música que está hecha con instrumentos, incluso hay muchos vídeos que son sobre sonidos de la naturaleza, sonidos de tormentas y lluvias torrenciales, sonidos del mar, incluso he encontrado algunos que son sobre los chasquidos del fuego. Simplemente se requiere una música súper relajante y ponerlo a un nivel de volumen justo. Justo ni demasiado alto, ni demasiado bajo. No tienes que escuchar como un susurro ni debe de ser lo suficientemente alto como para que te moleste, aunque sí para que oculte, si hay algún sonido exterior de fuera de tu casa. Con esto lo que consigues es crear un primer ambiente de tranquilidad. Has de utilizar una luz tenue o directamente sin luz utilizando velas especiales para masajes tántricos. Además, si puede ser, que esas velas que utilices sean velas perfumadas porque los olores influyen en nuestro estado anímico y en nuestro estado de relajación. Con la música, la luz tenue y relajante y un cambio en los olores, lo que haces es crear un ambiente que rompe todos los patrones del ambiente que tienes en el día a día, del que hay en tu trabajo, en cada lugar de trabajo, del que hay en la calle, en tu cocina… Todo eso sólo que se crea es un microclima más tranquilo, relajado y que te permitirá desconectar de todo. Eso es de vital importancia. ¿Cómo hay que dar un masaje tántrico a mujeres y a hombres? Es importante mencionar que este tipo de masajes tántricos, tanto hombres como mujeres, lo pueden recibir. Y, por si alguien lo estaba dudando, el masaje tantico es una manera de estimular que ha de llevarte al orgasmo. Quizás, los principios tántricos y las personas que llevan a cabo este estilo de vida, digan lo contrario, pero para nosotros y para el nivel de que estamos hablando, sí. El masaje tántrico acaba con un gran orgasmo. Para llegar al paraíso mediante un masaje tántrico, necesitamos estar tumbados en una camilla, en una cama o una zona acomodada, con un con mantas y con cojines en el suelo. El lugar donde darlo da un poco igual, pero ha de ser un sitio donde la persona que esté tumbada, esté cómoda y este tranquila, no sobre un suelo tan duro como una piedra. Pero vayamos ya a cómo dar un masaje tántrico, ¡la práctica! Al comenzar, la persona tiene que estar tumbada boca abajo y con una toalla cubriéndole el trasero. Aunque él o ella tienen que estar desnudos completamente. La persona que haga el masaje debe tener un aceite especial para masajes tántricos ya que este tipo de aceite ayuda a la relajación. Incluso pueden usar aceites comestibles de sabores para hacer algo que comentaremos al final. Para empezar a dar el masaje tántrico hay que comenzar de forma sencilla, haciendo una presión muy suave por todo el cuerpo. Se empieza por los tobillos, acariciando los pies y se va subiendo, se va subiendo poco a poco. Es un masaje en el que no hay prisa, en el que la persona que lo está recibiendo tiene que pasar desde el estado normal y corriente de su día a día a un estado de relajación profunda. Y eso no se consigue pasando de cero a 100, para conseguirlo es mejor hacerlo de forma tranquila, durante media hora o durante 45 minutos que es lo que se suele tardar en hacer este tipo de masajes. Prosigamos. A la hora de hacerlo, hay que ir acariciando sus tobillos, los gemelos, la parte de los muslos… Puedes dar un pequeño masaje en el trasero estando todavía con la toalla y luego subir por la espalda, por los costados. Recordamos que esto tiene que ser muy suave, tiene que ser como si fuera una corriente de agua que va pasando lentamente… No hay que meter los dedos, ni hay que trabajar en que hacer lo que vemos en las películas: “Coger las manos y empezar a dar golpecitos… Cla, cla, cla”. Nada de eso. Al menos, no lo hagas si no eres experto. Con un nivel básico de masajes tántricos, limitémonos a hacer lo básico. ¡Continuemos! Entonces tienes que recorrer todo su cuerpo, como hemos dicho. Subiendo por sus piernas, trasero, recorre su espalda… Es importante conocer ciertas zonas que aumentan la relajación y la excitación como: • La parte de los tobillos es relajante. • Los laterales de las rodillas también has de masajearlos. • Sube por el trasero. Aunque pueda parecer que no, acariciar y masajear el trasero es muy tranquilizante. • Toca las cervicales. • Detrás del cuello • Incluso, si todos os podéis acordar o habéis visto alguna vez, recordar estos tipos de aparatos chinos que son como ganchos con bolitas que sirven para masajear la cabeza. Pero si vas a hacer eso, lávate las manos de aceite. • No te olvides de la sien y de pararte en las mejillas. Tienes que recorrer cada parte del cuerpo que existe… Al igual que los brazos. Una vez hayas realizado ese recorrido de los pies a cabeza y de la cabeza a los pies, si quieres ya puedes acariciar sus zonas erógenas para aumentar su libido. Para ello, retira la toalla y acaricia el interior de los muslos y después, la zona del ano, de la vagina o los testículos, en función de quién lo esté recibiendo. ¿Cuál es la segunda parte del masaje erótico? Cuando hayas acabado de hacer ese recorrido, da la vuelta a tu compañero o compañera y colócale boca arriba. Y ahora vuelves a comenzar desde el rostro, tocando cada centímetro de su piel, vas por el cuello, los hombros, la cara interna de los brazos, las muñecas, las manos… Vas bajando por el pecho, acariciando los costados, el estómago, el pubis las piernas, las espinillas y los pies. Y, de nuevo, sube y realiza todo ese recorrido centrándote un poco más en lo que son las zonas erógenas del hombre y de la mujer. ¿Cómo estimular las partes erógenas de la mujer y del hombre? Comencemos por la mujer. Se recomienda que se empiece a hacer una estimulación de los pechos, sobre todo en la mujer. Además esto servirá para que muchos hombres aprendan sobre una de las mayores quejas de las mujeres y es que: “Los pechos hay que acariciarlos, no hay que sobarlos y masajearlos como si estuvieras haciendo pan. Si no que hay que hacerlo con delicadeza”. Hay que acariciar la aureola, el pezón, los laterales del pecho, etc. Esto es muy relajante: bajar por el canalillo. No sólo cuando le hagas un masaje tántrico a la mujer, sino también al hombre. Baja por allí hasta el estómago. Después ya te puedes centrar en la zona erógena. En lo que es la vagina y en el pene. Aquí hay que hacerlo igual, incluso puedes utilizar un poco más de aceite para masaje tántrico porque cuanto mayor deslizamiento, más placer. Debes empezar desde las zonas exteriores hacia las interiores. En el caso de la mujer, no hay que ponerse ahí a tocar su clítoris y meterle el dedo a diestro y siniestro, sino lo que hay que hacer es empezar a recorrer todos los labios externos y luego los internos. Acariciar el clítoris por encima y por debajo, como si estuvieras masturbando a tu chica. Ya deberías saber cómo hacérselo a tu chica y a cada una le gusta una cosa, así que el cómo continuar hasta que ella llegue al orgasmo, nos lo vamos a saltar. Respecto al hombre, no hay que cogerle el pene y comenzar a hacer el movimiento típico de arriba abajo como si le estuvieseis masturbando. No os aféresis a su pene de la misma manera. Hay muchísimos tipos de movimientos y muchos sitios en los que coger ideas para ello. Además no se puede olvidar uno de estimularle los testículos. Por ejemplo, para hacer un buen movimiento has de acariciársela, cogérsela por el tronco con una mano con una mano y con la otra, hacer como si estuvierais dando vueltas sobre su glande con la mano en forma de cuenco. Rodeándolo. Se puede dar un pequeño masaje con los pulgares. La zona de los testículos es muy importante y el perineo. ¿Cómo acabar un masaje tántrico? ¿Cómo actuar ante su gran orgasmo? Como podéis ver, la parte de la estimulación de las zonas erógenas es muy importante para llegar al orgasmo, pero esto no sirve de mucho si no se ha acondicionado mentalmente a la otra persona para que desconecte, para que se relaje y para que pueda disfrutar más. Cuando veas que la otra persona ya está llegando al orgasmo, tienes que saber que hay muchas formas de hacerle concluir. Aunque antes destacaremos lo siguiente. Lo realmente ideal, independientemente de la estimulación final que ahora veremos, ya que eso depende de los gustos de cada de cada persona, es hacer que llegue muy lentamente al orgasmo. Las tres formas de finalizar un masaje tántrico son estas: 1) De forma manual. En esta forma manual es importante que, cuando se vaya llegar al orgasmo, a ese momento en el que todos decimos más rápido, más rápido, más, más, más… La persona que hace el masaje, haga lo contrario. Es decir, que ralentice sus movimientos y se vaya más despacio para prolongar en el tiempo el placer. Con esto nos aseguramos que su grito será todavía mucho mayor. 2) La segunda tiene que ver con algo que mencionamos anteriormente respecto a que uses aceites para masajes tántricos que sean comestibles. De esta forma podrás concluir el masaje de forma oral. Pero hay que hacerlo igual, todo muy pausado y muy despacio. Y, tanto en el caso de hacérselo a la mujer o al hombre, el sexo oral hay es mejor hacerlo sin utilizar las manos. Así sólo estimulas las partes más placenteras del sexo de la otra persona. Su clítoris o su glande, con la lengua, sin ayuda de nada más. 3) Una tercera opción es la penetración. En este caso, lo mejor sería que la mujer se estuviera encima y cabalgar hasta que el hombre llegue al orgasmo, cuando ella sea quien da el masaje tántrico. Y que el hombre le coja las piernas a la mujer y se las levante hasta colocarlas apoyadas sobre sus hombros. La penetración ha de ser lenta también, con movimientos suaves. Es posible que hayamos repetido esto 40 veces pero es que es una de las claves más importantes y más destacadas. Se disfrutará más si se hace de manera tranquila que si se hace todo deprisa y corriendo Por último, destacar que esto debe ser algo mutuo. Por ejemplo, lo puede hacer el hombre a la mujer pero tiene que ser recíproco y, ese mismo día o al día siguiente, debe ser ella quien se lo haga a él. Si uno de los amantes experimenta todas esas sensaciones y el otro no, la persona que no lo va a recibir nunca se va a quedar un poco vacía porque va ver lo placentero que es, pero no va a poder sentirlo como la otra persona lo siente. No sentirá ese estado de relajación, ni lo bien que se lo puede pasar, ni lo mucho que puede gritar.