Conducir en moto acompañado: ¡Empatía!

Me encanta rodar solo. Me encanta hacer rutas con mis amigos, cada uno en su moto. Pero confieso que desde siempre me ha gustado mucho viajar a dúo. Y, perdonar mi inmodestia, creo que soy bueno en esto. Cuido de que mi acompañante vaya seguro, cómodo y de que disfrute. Sed sinceros, ¿vosotros hacéis lo mismo? Si me dijeseis que os diera un consejo, un solo consejo, para conducir acompañado os resumiría todo en una sola palabra: ¡Empatía! Ponte en su lugar… y si de verdad lo haces, todo irá rodado. El pensar en el acompañante es algo que hay que hacer no en el momento de salir, sino en el momento de comprar la moto, en el momento de comprar la ropa y en el momento de planificar la ruta. Y luego una vez en marcha también, porque la conducción, por el mayor peso, pero también por la comodidad y seguridad del pasajero, es muy distinta. Elige bien. Si vas a viajar a dúo, elige bien tu moto. Os voy a contar la primera vez que fui a Jerez y vi a una pareja, el conduciendo un Yamaha R1 de las primeras, bien equipado y ella con un equipamiento muy malo, una pesada mochila, subida “ahí” arriba en un asiento mini y con las piernas encogidas. Pensé: “¡eso es amor!” Desde luego, a mí no me engañan así. Si nos gusta viajar debemos tenerlo en cuenta a la hora de comprar la moto y buscar una que sea confortable para el acompañante, que disponga de lugares en los que agarrarse y pueda tener una razonable visibilidad., sobre todo si nuestra idea es viajar. Y, si es posible, mejor una que nos permita la instalación de maletas laterales o al menos llevar el equipaje de forma práctica y segura. Equipamiento. Siempre insisto en hacer especial hincapié en el tema del equipamiento del pasajero, porque si nos caemos de la moto nos caemos todos. Cada vez que salgo en moto veo a motoristas que viajan a dúo con su pareja, amigo e incluso con su hijo, con un equipamiento ridículo que a mí me daría vergüenza: Casco quita multas, cazadora y pantalón vaqueros, guantes en invierno y zapatillas deportivas… lamentable. Los mínimos son un buen casco, guantes, botas adecuadas, pantalones con refuerzos y una cazadora que abrigue en invierno y proteja suficientemente. Y si es posible el airbag, aún mejor. Si tenemos un acompañante habitual a la hora de comprar la moto y comprar equipamiento hay que pensar en él (ella) tanto o más que en nosotros mismos. Planificación. Por trabajo y afición diseño y organizo rutas en moto o solo o con acompañante. Y cuando las hacemos con acompañante, al final muchos de los acompañantes, da igual el sexo, me felicitan. ¿Por qué? Porque si vas acompañado debes prever paradas más frecuentes porque conducir cansa más, pero distrae y al pasajero le afecta posiblemente más el cansancio. Mayor peso. Otra cosa que diferencia a las motocicletas de los coches es que la conducción cargada o descargada cambia mucho más. Ten en cuenta que en una moto ligera o más aún en un Scooter viajar dos personas más equipaje pueden duplicar su peso. En una moto grande en torno al 50 por ciento, y casi todo ese incremento de peso repercute sobre la rueda posterior. Eso compromete a la suspensión trasera, que se hunde y, algo que a veces se olvida, cambia la geometría de la moto. Por eso es tan importante que las motos lleven la suspensión trasera regulable, ya sea a mano o de forma electrónica. Endurecer y-o levantar la suspensión posterior, sirve no sólo evitar que hagamos topes sino, lo más importante, hace que la geometría de la moto no cambie y su comportamiento sea más parecido a cuando vamos descargados. Conducción. Si te digo que con acompañante no debes frenar… ¿qué te parece? ¿Una locura? Pues no, anticipa y reduce el uso del freno al mínimo. Prácticamente, incluso en carretera virada, puedes hacerlo. ¿Te parece increíble? En los cursillos en circuito muchas veces proponemos un ejercicio: Dar dos o tres vuelta sin tocar el freno. Anticipar es una clave. La otra es la suavidad. Suavidad al frenar cuando tengas que hacerlo, al acelerar y al girar. Al girar recuerda una cosa más: Si vamos acompañados nuestros movimientos en la moto se verán limitados, por ejemplo, no nos podemos ni siquiera descolgar levemente en las curvas eso haría incómodo el viaje al pasajero y sobre todo le despista; en este caso la moto y los ocupantes tienen que formar un todo unido. Y en cuanto a los frenos, con acompañante el trasero gana en protagonismo, pues la moto lleva más peso detrás y al frenar la rueda trasera se produce una menor transferencia de peso… Enseñar. Es muy importante tener complicidad con tu acompañante. Por ejemplo, en mi caso siempre les digo que no se suban ni se bajen sin que yo se lo diga… si a una Adventure se te sube alguien de 50 kilos sin que estes preparado, la posibilidad de ir al suelo es alta. Conclusión. Conduce suave y con cuidado, escoge bien las rutas y asegúrate de que tus acompañantes tienen un equipamiento como el tuyo o mejor…