356. Cómo hacer el pino con la cabeza
Mi GYM en casa - Un pódcast de Sergio Catalán

Hacer el pino con la cabeza apoyada es una de las progresiones que nos ayudarán a hacer el pino apoyando sólo las manos en el suelo. Si nunca hemos trabajado en la posición invertida, es decir, cabeza abajo, es posible que tengamos dificultades para llevarla a cabo. Pino con la cabeza apoyada Antes de continuar quiero dejar claro a qué postura me estoy refiriendo. Es un pino en el que apoyamos la cabeza en el suelo además de las manos formando con nuestro cuerpo una especie de trípode. No me estoy refiriendo a hacer el pino exclusivamente apoyando la cabeza en el suelo (sin manos). ¿Por qué no me sale hacer el pino? Hay personas que tienen facilidad para hacer ejercicios gimnásticos y otras que no tanto. Si eres de las primeras, es posible que el primer día que intentes el pino con la cabeza apoyada, consigas tu objetivo. Pero hay personas, diría que la mayoría, en las que al ponernos boca abajo parece que la cosa no va bien y nos bloqueamos. Es algo totalmente normal. Cuando nuestro cuerpo, o en este caso sería mejor decir nuestra mente, percibe una situación de inseguridad, intenta protegerse de ella. En este caso nuestra mente dice: - No te pongas así, que te puedes hacer daño. Entonces nuestro cuerpo parece que no quiere facilitarnos la tarea de hacer el pino. Lo que tenemos que hacer es enseñar a nuestra mente que tenemos la situación controlada, para que se relaje y nos permita hacer este ejercicio gimnástico. Primeros pasos para hacer el pino con la cabeza apoyada Paseo del oso El primer paso para ir adaptándonos con comodidad a esta nueva postura será ir fortaleciendo los apoyos, en este caso, nuestros brazos, muñecas y manos. Para ello haremos el ejercicio de caminar como un oso, también llamado paseo del oso (bear walk en inglés). De esta forma, a la vez que fortalecemos lo que será nuestro apoyo a la hora de hacer el pino, también enseñaremos a nuestra mente que éstos son seguros y que una postura casi invertida, tampoco nos crea problemas. Para hacer el paseo del oso nos pondremos con las manos y los pies apoyados en el suelo (las rodillas no) e iremos caminando intentando elevar el culo todo lo que podamos. De esta forma cargamos más peso en nuestros brazos, que es el objetivo que buscamos con este ejercicio. Haz un par de paseos del oso, pero no demasiado largos (sobre todo al principio). Rana El siguiente ejercicio sería el de la rana. En este caso no estamos en una posición tan invertida como en el paseo del oso, pero trabajamos mucho más el apoyo de las manos. De esta manera ganaremos fuerza y confianza en estos apoyos. Así, cuando también dispongamos del apoyo extra que nos da la cabeza, nos sentiremos mucho más seguros a la hora de hacer el pino. Has 2 o 3 series de 10 a 20 segundos. Es un ejercicio que tiene cierta dificultad en cuanto al equilibrio, por lo que es posible que al principio te resulte difícil. Si lo pruebas varios días y no te sale, no te preocupes, pasa al siguiente. Trípode agrupado Este será el último ejercicio antes de hacer el trípode normal o pino con la cabeza apoyada. Será igual pero en este caso mantenemos las piernas agrupadas. De esta forma, tenemos más control sobre nuestro cuerpo y da una sensación de mayor seguridad.