210. ¿Cómo leer las etiquetas de los alimentos?
Mi GYM en casa - Un pódcast de Sergio Catalán

Que no te engañe una bonita presentación llena de reclamos en plan: "0% de lo que sea" o "enriquecido con vitaminas". Lo importante, lo realmente importante es lo que viene por detrás, en la etiqueta con la información nutricional. Este artículo no pretende ser una guía muy detallada sobre etiquetado de alimentos, sino más bien lo que nos haga ver que tenemos que mirar más allá de la portada para realmente saber por lo que estamos pagando. Aun así veremos algunos ejemplos prácticos. Vamos a ir de más importante a menos. Mejor aún sin etiqueta Por supuesto, si vas a la frutería y te compras un manojo de acelgas es la mejor opción de tipo de producto que puedes tener. En el manojo de acelgas no va a venir escrito que es rico en potasio, vitamina A, calcio y un largo etcétera. Parece que si compramos unas galletitas enriquecidas o una especie de papilla plastificada en un envase lleno de colorines que muestra sus beneficios y nos dice que equivale a una fruta, es mucho mejor que una fruta. Pues no, elige la fruta, además es mucho más barata. Mientras los productores, que no fabricantes, ya que las frutas y verduras no se fabrican (y ahí está la gracia del asunto), no pongan los beneficios en una etiqueta, usemos el sentido común y compremos en consecuencia. Dicho esto, todos, en mayor o menor medida, también consumimos otros productos que viene empaquetados. Estos sí llevan etiqueta, vamos a ver qué debemos buscar en ella. ¿Qué mirar en la etiqueta? Aunque la información nutricional es importante, lo más importante son los ingredientes. Y lo más importante de los ingredientes es que vienen colocados por orden. El que va primero es el más abundante, el siguiente es el segundo más abundante, etc, etc. ¿Por qué es tan importante? Otro motivo por el que irnos directamente a los ingredientes, es que podemos caer en la trampa de que un producto es mejor que otro porque veamos en los valores nutricionales que tiene azúcares o que tiene más que otro. O como ambos tienen azúcares da lo mismo uno que otro. La gran mayoría de alimentos tiene azúcares presentes de forma natural. Por ver un ejemplo claro, los yogures naturales (no azucarados) tienen algo de azúcares en forma de lactosa. Los naturales azucarados tienen más azúcares porque llevan los azúcares naturales más el añadido. En este caso, si nos vamos a los ingredientes y somos capaces de encontrar un yogur que sólo tenga leche y fermentos sabremos que no tiene azúcar añadido aunque encontremos azúcares en la tabla de la información nutricional. Dale la vuelta al paquete Ante un reclamo publicitario, porque no es otra cosa, diciendo que está enriquecido o que es 0% en algo, ponte a buscar la triste y poco colorida etiqueta, ella te dirá la verdad (o legalmente debería hacerlo). Pasa de la portada, céntrate en la realidad que contiene. Para ilustrar esto vamos a ver algunos ejemplos. Con ellos podremos utilizarlos directamente y además mirar esto mismo en productos que ya compramos habitualmente: Carne picada Hoy en día es difícil encontrar en el súper bandejas de carne picada 100%. Normalmente van en proporciones del 80 - 90 % de carne picada y el resto un relleno. Suele ser fécula de patata con agua o algo similar (como suele pasar en el jamón York). Puedo entender algún tipo de conservante para que aguante más, pero que una bandeja de carne picada tenga un 20% de algo que no ...