Laudes Viernes de la XXXIII semana del Tiempo Ordinario - San Andrés Dung-Lac y Compañeros

Liturgia de las Horas - Un pódcast de Jose Camacho Cotto

LAUDES VIERNES DE LA XXXIII SEMANA DE ORDINARIO (Oración de la mañana) - San Andrés Dung-Lac y Compañeros INVOCACIÓN INICIAL V. Señor abre mis labios R. Y mi boca proclamará tu alabanza INVITATORIO Ant. Venid, adoremos al Señor, rey de los mártires.  SALMODIA Salmo 50 - Ant. Aceptaras los sacrificios, ofrendas y holocaustos, sobre tu altar, Señor. Cántico - Ant. Con el Senor triunfara y se gloriara la estirpe de Israel. Salmo 47 - Ant. Entrad en la presencia del Señor con aclamaciones. CÁNTICO EVANGÉLICO Ant. Dichosos los perseguidos por causa de la justicia pues de ellos es el reino de los cielos. Cántico de Zacarías. EL MESÍAS Y SU PRECURSOR      Lc 1, 68-79 Bendito sea el Señor, Dios de Israel, porque ha visitado y redimido a su pueblo. suscitándonos una fuerza de salvación en la casa de David, su siervo, según lo había predicho desde antiguo por boca de sus santos profetas: Es la salvación que nos libra de nuestros enemigos y de la mano de todos los que nos odian; ha realizado así la misericordia que tuvo con nuestros padres, recordando su santa alianza y el juramento que juró a nuestro padre Abraham. Para concedernos que, libres de temor, arrancados de la mano de los enemigos, le sirvamos con santidad y justicia, en su presencia, todos nuestros días. Y a ti, niño, te llamarán Profeta del Altísimo, porque irás delante del Señor a preparar sus caminos, anunciando a su pueblo la salvación, el perdón de sus pecados. Por la entrañable misericordia de nuestro Dios, nos visitará el sol que nace de lo alto, para iluminar a los que viven en tiniebla y en sombra de muerte, para guiar nuestros pasos por el camino de la paz. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén. PRECES “Nos has comprado, Señor, con tu sangre.” Conclusion V. El Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna. R. Amén. (644)