Laudes Jueves de la III semana de Cuaresma

Liturgia de las Horas - Un pódcast de Jose Camacho Cotto

LAUDES JUEVES DE LA III SEMANA DE CUARESMA (Oración de la mañana) - III semana del Salterio INVOCACIÓN INICIAL V. Señor abre mis labios R. Y mi boca proclamará tu alabanza INVITATORIO Ant. Ojalá escuchéis hoy la voz del Señor: “No endurezcáis vuestro corazón”. SALMODIA Salmo 86 - Ant. ¡Qué pregón tan glorioso para ti, ciudad de Dios. Cántico - Ant. El Señor llega con poder, y su recompensa lo precede. Salmo 98 - Ant. Ensalzad al Señor, Dios nuestro, postraos ante el estrado de sus pies. RESPONSORIO BREVE  V. Él me librará de la red del cazador. R. Él me librará de la red del cazador. V. Me cubrirá con su plumaje. R. Él me librará de la red del cazador. V. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. R. Él me librará de la red del cazador. CÁNTICO EVANGÉLICO Ant. “Si yo arrojo los demonios por el poder de Dios es señal de que ha llegado a vosotros el reino de Dios”, dice el Señor.  Cántico de Zacarías. EL MESÍAS Y SU PRECURSOR      Lc 1, 68-79 Bendito sea el Señor, Dios de Israel, porque ha visitado y redimido a su pueblo. suscitándonos una fuerza de salvación en la casa de David, su siervo, según lo había predicho desde antiguo por boca de sus santos profetas: Es la salvación que nos libra de nuestros enemigos y de la mano de todos los que nos odian; ha realizado así la misericordia que tuvo con nuestros padres, recordando su santa alianza y el juramento que juró a nuestro padre Abraham. Para concedernos que, libres de temor, arrancados de la mano de los enemigos, le sirvamos con santidad y justicia, en su presencia, todos nuestros días. Y a ti, niño, te llamarán Profeta del Altísimo, porque irás delante del Señor a preparar sus caminos, anunciando a su pueblo la salvación, el perdón de sus pecados. Por la entrañable misericordia de nuestro Dios, nos visitará el sol que nace de lo alto, para iluminar a los que viven en tiniebla y en sombra de muerte, para guiar nuestros pasos por el camino de la paz. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén. PRECES “Que tu palabra, Señor, sea luz para nuestros pasos.” Conclusion V. El Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna. R. Amén. (120)