En la usurpación, no hay ética feminista
Las Desobedientes - Un pódcast de Las Desobedientes
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La usurpación concreta y simbólica es misoginia. El patriarcado le ha arrebatado a las mujeres tanto, que hay una deuda histórica tremenda. Tenemos que tener un sable desenvainado para protegernos a nosotras y a nuestras creaciones de los robos cínicos de los varones. A su vez, es necesario que reflexionemos sobra la urgencia de trabajar nuestra misoginia internalizada, la cual provoca actos antiéticos contra otras compañeras y sus creaciones. Apropiarse de la creación intelectual de las otras: invisibilizar, no nombrar, guardar silencio y reconocer en lo “oscurito”; contradicen a la ética feminista y ésta urge; porque es una forma de justicia para nosotras mismas y para las demás.