DIA 194 - Somos Templo del Espíritu Santo

La Biblia en Un Año (con el pastor Julian G.) - Un pódcast de Julian Gamba

Hoy estaremos leyendo 2 Crónicas 33-34, 1 Corintios 3 y el Salmo 106:22-31. En 2 Crónicas 33, conocemos la historia de Manasés, uno de los reyes más perversos de Judá. Levantó altares a dioses falsos, profanó el templo y hasta practicó hechicería. Sin embargo, cuando fue llevado cautivo a Babilonia, se humilló profundamente delante de Dios, y Dios lo restauró. Es una de las historias más claras de arrepentimiento y gracia en el Antiguo Testamento. En 2 Crónicas 34, su nieto Josías comienza a reinar a los ocho años y decide buscar al Señor desde muy joven. Derriba ídolos, repara el templo y al encontrar el libro de la Ley, se humilla y lleva al pueblo a renovar el pacto con Dios.Reflexiona: ¿Crees que Dios puede restaurar incluso las historias más rotas? ¿Estás dejando que la Palabra de Dios guíe tus decisiones como lo hizo Josías?En 1 Corintios 3, Pablo exhorta a la iglesia de Corinto porque había divisiones entre ellos. Algunos decían: “Yo sigo a Pablo”, otros: “Yo sigo a Apolos.” Pablo les recuerda que tanto él como Apolos son solo siervos, y que el crecimiento viene de Dios. Luego utiliza una imagen poderosa: “Ustedes son el templo de Dios y el Espíritu de Dios vive en ustedes” (v. 16). Nos enseña que lo que construimos para Dios debe tener fundamento sólido, porque todo será probado por fuego.Reflexiona: ¿Estás edificando tu vida espiritual sobre fundamentos eternos o temporales? ¿Tu enfoque está en Cristo o en personas?En el Salmo 106:22–31, el salmista continúa recordando la rebeldía de Israel, incluyendo el momento en que adoraron a Baal Peor y participaron en prácticas paganas. Pero también resalta la valentía de Finees, quien actuó con celo por la santidad de Dios y así detuvo la plaga. Esto nos enseña que una sola persona dispuesta a actuar con justicia puede traer restauración a muchos.