La libertad de Dios y el placer de los devotos - Ś.B. 3.1.44

Kṛṣṇa en tu Casa - Un pódcast de Dhīra Dāsa - Daniel Escobar

La ley del karma, promulgada por el Señor Supremo para las entidades vivientes, no se puede aplicar a Él, ni tampoco tiene el Señor ningún deseo de mejorarse a Sí mismo mediante actividades como las de los seres vivientes ordinarios. Él disfruta plenamente de Sí mismo. Por otra parte, las almas espirituales son eternas buscadoras de placer, el cual lo encuentran a plenitud únicamente en Dios.