No hay excusa que valga

ibgraciaredentora - Un pódcast de César Augusto García Rincón

Este sermón destaca que todos somos inexcusablemente pecadores ante Dios, atrapados en nuestras excusas y juicios hacia otros. Nos insta a reconocer nuestra necesidad de arrepentimiento y fe en Cristo, quien, a través de Su sacrificio en la cruz y Su resurrección, ofrece la única esperanza de salvación. La verdadera justicia y liberación se encuentran solo en Cristo, quien nos llama a abandonar nuestros pecados y confiar plenamente en Él para evitar la condenación eterna.