Episodio 40 - Andrés Caicedo (Daniel Pacheco)

Epistolar - Un pódcast de Antología de lo íntimo - Miercoles

Categorías:

El colombiano Andrés Caicedo fue un escritor maldito. Tenía angustia de vivir. Solía decir: "Nací con la muerte adentro". Decía también que vivir más de 25 años era una insensatez. Le escribió esta carta a su mamá, antes de uno de sus intentos de suicidio. Finalmente, lo logró el 4 de marzo de 1977, después de tomar 60 pastillas de secobarbital, que se usaba en tratamientos de la angustia y la ansiedad. Murió, como quería, a los 25 años. Dejó una obra compuesta por novelas, cuentos, guiones de cine y obras de teatro. Lee el actor colombiano Daniel Pacheco.  ****** Cali, 1975 Mamacita:  Un día tú me prometiste que cualquier cosa que yo hiciera, tú la comprenderías y me darías la razón. Por favor, trata de entender mi muerte. Yo no estaba hecho para vivir más tiempo.  Estoy enormemente cansado, decepcionado y triste. Y estoy seguro de que cada día que pase, cada una de estas sensaciones o sentimientos me irán matando lentamente. Entonces prefiero acabar de una vez. De ti no guardo más que cariño y dulzura. Has sido la mejor madre del mundo y yo soy el que te pierdo, pero mi acto no es derrota. Tengo todas las de ganar, porque estoy convencido de que no me queda otra salida. Nací con la muerte adentro y lo único que hago es sacármela para dejar de pensar y quedar tranquilo. Acuérdate solamente de mí. Yo muero porque ya para cumplir 24 años soy un anacronismo y un sinsentido, y porque desde que cumplí 21 vengo sin entender el mundo. Soy incapaz ante las relaciones de dinero y las relaciones de influencias.  Y no puedo resistir el amor: es algo mucho más fuerte que todas mis fuerzas, y me las ha desbaratado. Dejo algo de obra y muero tranquilo. Este acto ya estaba premeditado. Tú premedita tu muerte también. Es la única forma de vencerla. Madrecita querida, de no haber sido por ti, yo ya habría muerto hace ya muchos años. Esta idea la tengo desde mi uso de razón. Ahora mi razón está extraviada, y lo que hago es solamente para parar el sufrimiento. Andrés