¿Por qué los coches americanos son tan malos?
El Garaje Hermético de Máximo Sant - Un pódcast de Máximo Sant
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A la pregunta de por qué los coches norteamericanos son tan malos surge otra pregunta y una respuesta. La pregunta, ¿de verdad son tan malos? Pues sí. Y la respuesta: Porque no hacía falta que fueran mejores… ambas cosas os las contamos en este video. ¡Esta vez no voy a empezar por el principio! Voy a comenzar por una vivencia personal… de la que aprendí mucho. Recuerdo mi primer viaje al Salón de Detroit…fue en los años 90, cuando los salones de automóvil eran importantes y las marcas presentaban novedades… ahora ya no es así. Con el Salón de Detroit arrancaba la “temporada” de salones porque era el primero del año… en los USA no hay festividad de los Reyes Magos, como en otros países más “civilizados”. El salón abría las puertas el día 2… así que nos tocó viajar el día 1 de enero. ¡Me ilusionaba ir a Detroit, la cuna del automovilismo americano! ¿Sabéis lo que más me sorprendió? La cantidad de coches americanos oxidados, pero con las puertas y los paneles de chapa a la vista cubiertos de óxido… me dejó sorprendido. Es cierto que, en Detroit, una ciudad muy fría, nieva mucho y echan mucha sal… pero tan cierto como que los coches japoneses y europeos de edad equivalente, no mostraban esos signos de óxido. Y me sorprendió la ciudad, porque Detroit siempre está en los puestos de cabeza de las ciudades más peligrosas de los EE.UU. y una de las más peligrosas del mundo. Y es, además, el casco urbano abandonado más grande del Mundo. El que fue un símbolo de poderío industrial, del “sueño americano”, hoy se venden viviendas por el precio simbólico de un dólar, dado que nadie quiere habitar el inhóspito silencio de unos barrios abandonados que no tienen electricidad, ni agua, ni policía, ni escuelas. Como os decía daba pena ver los coches americanos más antiguos, no solo con óxido, sino verdaderamente avejentados, coches con menos de 10 años que se “caían” a trozos… así que en el Salón pregunté a un ingeniero de Ford, de rango muy alto pero que era de origen hispano. Tuve con él un almuerzo muy agradable, aprendí mucho… y me lo contó… Y, como hacemos en este canal, comenzó por el principio: Por la historia. Porque la forma de entender el automóvil en los USA es distinta a la forma de entenderla en otros países, y muy distinta de cómo se entiende en Europa y Japón.El automóvil, en los USA, no llegó antes, pero se democratizó antes, gracias sobre todo el Ford T, un coche cómodo, práctico, fácil de conducir… y barato, muy barato. Y el consumidor norteamericano busca en un coche el confort y la practicidad… y como hay espacio de sobra, esto se traduce en tamaño; busca que sean fáciles de conducir, por eso son todos automáticos y con direcciones suavísimas y muy desmultiplicadas; y, sobre todo, que sean baratos. En esto me insistió mucho, porque no podemos olvidar que los USA son el paraíso del consumismo y eso se traduce en comprar, comprar y comprar. Y en el tema del coche, en cambiar de coche con frecuencia… Un norteamericano prefiere un coche grande, bien equipado, barato… y cambiarlo cada poco tiempo. Eso mejor que un coche caro que les dure muchos años, porque los coches americanos envejecen muy rápido en todos los sentidos… No sólo se oxidan, sino que estéticamente cambian muncho incluso de un año a otro. En los USA es donde se inventaron los “restyling” y los “model year” porque, aunque el coche fuese esencialmente el mismo, las marcas cambiaban la estética por dentro y por fuera justamente para que los coches ya vendidos se quedasen viejos enseguida y el usuario quisiese cambiar por “el nuevo”. Para mi hay una marca americana distinta, que destaca entre las demás por su nivel de calidad y acabados, una marca que seguro que os suena: Cadillac. Y no me qjuiero olvidar de Oldsmobile. Lo simple, en el mundo del motor USA, triunfa. Durante decenios los coches americanos estaban todos “cortados” por el mismo patrón: Carrocería separada del chasis y de generoso tamaño, chasis de vigas generalmente en X, motor V8 o como mínimo de seis cilindros, cambio automático, propulsión posterior con eje rígido y blandísimas suspensiones para ser confortables… La fórmula funcionaba, porque eran coches fáciles y baratos de hacer. Pero sobre todo que funcionaban muy bien para lo que se les pedía, en un país de carreteras muy rectas y distancias largas. En Europa, con toda la población y las ciudades más “apretadas” y más cerca y con carreteras llenas de curvas, los coches eran más pequeños, más ligeros y mucho más sofisticados… algo parecido sucedía en Japón. Alguno dirá, “¿Baratos de fabricar los coches USA? Si la mayoría llevaban un V8 mientras en Europa o Japón lo habitual eran los simples 4 cilindros”. La respuesta es que sí, de 4 cilindros, pero nada simples. Construir un V8 de alta cilindrada y baja compresión para poder usar cualquier gasolina y conseguir no muchos caballos es más barato que un sofisticado motor de 4 cilindros… Los coches americanos no suelen triunfar, salvo excepciones, fuera de los USA. Como concluíamos en el video titulado “USA vs. Europa, ¿por qué somos tan diferentes?” para los coches americanos el camino de “ida”, la exportación a Europa y otros mercados, no es fácil. En cambio, el camino de “vuelta” es decir, la exportación a los USA de coches europeos y japoneses, desde no hace mucho coreanos y ahora chinos, es un camino más fácil. Los coches americanos han mejorado, pero en mi opinión no lo suficiente. NO hay más que ver cómo les van las cosas a las marcas tradicionales americanas… porque Tesla es otra cosa, en todos los sentidos. Como decía al principio, la ciudad de Detroit es una muestra de lo que ha sido y es la industria americana del automóvil… creo que no hay más que añadir. Coche del día. En general no soy muy fan de los coches americanos, aunque hay muchos que me gustan. Y uno que me apasiona: El Cadillac Eldorado Biarritz de 1959. Bajo el capó tenía un motor, V8 por supuesto, de 6,3 litros y 345 CV. Contaba con todo el equipamiento de lujo que pudieras soñar y más. Y en cuanto a la estética, lo veis en las fotos, pero os digo una cosa: Al natural impresiona. Un descapotable de casi 6 metros y casi 2 toneladas y media…