Daytona: Playa, circuito y ¡Ferrari V12!
El Garaje Hermético de Máximo Sant - Un pódcast de Máximo Sant
Categorías:
Este es nuestra tradicional colaboración mensual de la revisa CEROaCIEN lo cual es garantía de dos cosas: Muy buenas fotos y muy buena información. Os recuerdo que CEROaCIEN solo se vende online (https://www.ceroacien.es). Y que, si eres garajista, tienes descuento si introduces el código GH5 ¡Ah! Y recordar los primeros suscriptores que hay que renovar la suscripción para recibir el próximo número 5 y sucesivos. El nombre de Daytona es un coche, un Ferrari que no se llama así, pero que fue el origen y la tradición de los mejores V12 Ferrari. Porque si te hablo del Ferrari 365 GTB/4 seguramente no sabes a qué Ferrari me refiero. Pero si te digo Ferrari Daytona, sin más, todos sabemos de que coche estamos hablando. Un modelo mítico, con un motor mítico y con una historia mítica. ¿Por qué se llama 365 GTB/4? Pues siguiendo la tradición, no siempre respetada, de Ferrari, el número hacer referencia a la cilindrada en cm3 de cada cilindro, en este caso 365 por doce cilindros, total, 4,4 litros. El 4 hace referencia a los 4 arboles de levas y el GTB significa Gran Turismo Berlinetta… París 1968. El Daytona, que es como le vamos a llamar, se presenta en sociedad en el Salón de París de 1968. Este modelo era la respuesta, entre otros, al desafío lanzado por Lamborghini. El diseño era más moderno y rompedor, sobre todo el frontal tan característico, pero es que técnicamente el Daytona apuesta por el motor de 12 cilindros en V colocado longitudinalmente y en la parte delantera con propulsión posterior. Costó arrancar la producción del Daytona. Primero, aunque el diseño era de Pininfarina, la carrocería se fabricaba, prácticamente a mano, en el carrocero Scaglietti, en ese momento industrialmente más desarrollada que Pininfarina. Segundo, en esos tiempos Italia fue literalmente asolada por huelgas interminables que afectaron a todas las marcas, incluía Ferrari. La polémica del motor delantero. Vale la pena detenerse en este asunto. Porque el Daytona pude ser considerado el último verdadero deportivo de motor delantero. Algunos periodistas lo alababan porque hacia al coche menos crítico de conducir y algo más práctico, habitable y cómodo frente a los coches con motor central, como era el Miura. Pero otros periodistas y probadores se preguntaban como si en competición ya estaba claro que el motor central era la mejor solución, el Daytona tenía ese pedazo de V12 ahí delante… Un motor único. Sin duda uno de los grandes atractivos del Daytona era y es su motor V12 a 60 grados de 4,4 litros, muy avanzado para la época. Llevaba cuatro arboles de levas, dos válvulas por cilindro y era de carrera corta, 81x71 mm. Tenía 6 carburadores Weber de doble cuerpo y una relación de comprensión muy alta para la época, 9,3 a 1, la potencia alcanzaba los 352 CV a 7.500 rpm… El Spyder. Confieso que para mí el auténtico Daytona es el Coupé, pero es Spyder es para muchos más bonito. ¡Ojo! no solo pierde el techo, sino que cambia la trasera y las ruedas pasan a ser de radios. Como curiosidad, fue un diseño de Scaglietti sobre la base del Coupé de Pininfarina. Carrocería: Hecha a mano. El Daytona esta rodeado de peculiaridades que, en pare, son las que le confieren esa mística tan particular. Ferrari lo presentaba como un coche moderno, pero en realidad no le era tanto. No solo por su motor delantero, sino por su bastidor que eran tubos de acero al cromo molibdeno sobre la que se encajaban partes de fibra, como los bajos, otras de acero como la carrocería y otras de aluminio, como las puertas y capós. La carrocería es una obra de arte, realizada con chapas muy finas a las que se les daba forma sobre moldes de madera. Luego, una vez acabadas, a base de masilla, lija y muchas horas, se las dejaba completamente lisas y listas para pintar. Interior, de su época. Por dentro el Daytona era hijo de su tiempo: Asientos inspirados en los bacquet de competición de la época, multitud de relojes de todo tipo y tamaño, volante primero de madera y luego de cuero y, desde luego, sin servodirección… Sensaciones. Pero en su tiempo, era todo lo contrario. Se decía que era uno de los deportivos más agradables de utilizar, gracias entre otras cosas a la precisión de su cambio y dirección, a su agilidad y estabilidad y, sobre todo, a su motor. Un motor sin altibajos, rotundo, potentes e infinito… El Daytona en competición. Los resultados del Daytona en competición darían para un video completo, porque en estos tiempos la competición a todos los niveles era lo más importante para Ferrari. Conclusión. Este guion me ha costado mucho escribirlo. ¿De quién es la culpa? Pues de la revista CEROaCIEN. Porque normalmente en los vídeos la dificultad está en qué contar… y en estos de CEROaCIEN la dificultad está en qué NO contar… ¡Hay tanta información!