1703. ¿Qué es mejor?

Comiendo con María (Nutrición) - Un pódcast de María Merino Fernández

Volvemos con otra ronda del juego ¿Qué es mejor?Aceite de Oliva Virgen vs. Aceite de Oliva Virgen ExtraAceite de Oliva Virgen Extra (AOVE): Es considerado la calidad más alta de aceite de oliva. Se obtiene de la primera prensada de las aceitunas, sin usar calor ni productos químicos, lo que se conoce como un proceso de extracción en frío. Tiene un sabor y aroma más intensos, contiene antioxidantes naturales y polifenoles en mayores cantidades, y su acidez es menor (no más de 0,8%). Estas características lo hacen ideal para consumir en crudo, como en ensaladas o para finalizar platos.Aceite de Oliva Virgen: También es un aceite de buena calidad, pero tiene una acidez ligeramente mayor (hasta 2%) y un sabor y aroma menos intensos. Aunque sigue siendo un producto saludable, tiene menos polifenoles y antioxidantes en comparación con el virgen extra. Puede usarse tanto para cocinar como para consumir en crudo, aunque sus cualidades organolépticas son menos destacadas.Lácteos Desnatados vs. Lácteos EnterosLácteos Enteros: Contienen más grasa, lo que les da una textura más cremosa y un sabor más rico. Las grasas lácteas son una fuente de ácidos grasos saturados, pero también de vitaminas liposolubles como la A, D, E, y K. Hay estudios que sugieren que el consumo moderado de lácteos enteros puede tener beneficios para el corazón y no necesariamente está asociado con un mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares.Lácteos Desnatados: Tienen menos calorías y grasa, lo que los hace una opción popular para quienes buscan controlar su peso o consumir menos grasas saturadas. Sin embargo, algunos nutrientes liposolubles pueden reducirse al quitar la grasa. Son una buena fuente de proteínas, calcio y vitaminas del grupo B.Azúcar vs. EdulcorantesAzúcar: Es una fuente de calorías vacías, lo que significa que aporta energía pero muy pocos nutrientes esenciales. El consumo excesivo de azúcar ha sido vinculado a diversos problemas de salud, como obesidad, diabetes tipo 2 y enfermedades cardiovasculares.Edulcorantes: Pueden ser artificiales o naturales y generalmente aportan poco o ningún valor calórico. Son útiles para controlar la ingesta de calorías y el manejo de la diabetes. Sin embargo, su impacto a largo plazo en la salud aún es objeto de investigación, y algunos estudios sugieren que podrían tener efectos negativos en el metabolismo, la microbiota intestinal y posiblemente en el apetito y el peso corporal.En resumen, la elección entre estos productos depende de tus necesidades nutricionales, condiciones de salud, objetivos dietéticos y preferencias personales. Es recomendable consultar a un profesional de la salud o un nutricionista para obtener asesoramiento personalizado.