Los efectos de la guerra en el turismo a Tierra Santa

Las celebraciones tradicionales que se conmemoran en la ciudad de Belén, no se llevaron a cabo como en años anteriores. Los desfiles, conciertos, ventas comerciales y festejos que por tradición celebran los miles de turistas que por esa fecha la visitan, se cancelaron debido a la guerra entre Israel y Hamás. Los casi 3 meses de guerra han afectado significativamente la dinámica social y económica que vive Israel y Cisjordania. Belén es una ciudad que se ubica en el centro de Cisjordania, a tan solo 9 kilómetros de Jerusalén, administrada por la Autoridad Palestina. Por esta fecha los habitantes de Belén reciben una gran afluencia de turistas cristianos que la visitan para la celebración de navidad, generando ganancias considerables para sus habitantes. Así mismo, Israel ha visto una caída en el flujo de turistas que principalmente la visitan por su historia, raíces religiosas, desarrollo y fama internacional. En 2022, 2.67 millones de turistas visitaron Israel, un nivel aceptable teniendo en cuenta que este mismo año el país dió apertura a los visitantes internacionales luego de la pandemia. La cifra récord se logró en 2019 con 4.5 millones de turistas que viajaron hacia Israel, generando un dinamismo económico que movió aproximadamente 13.500 millones de shekels, equivalentes a unos 3.8 millones de dólares. La dinámica del turismo favorece a israelíes y palestinos de Cisjordania, pero también beneficia a países vecinos como Egipto, Jordania y Líbano. En definitiva, la guerra ha afectado la economía de la región y costará algún tiempo recuperarse de esto.