El Ramadán y el ultimátum para liberar a los rehenes

Israel ha establecido una fecha límite para el comienzo de su ofensiva militar en la ciudad de Rafhá. En caso de que el grupo terrorista Hamás no libere a los rehenes que aún mantiene bajo su control antes del inicio del Ramadán, las FDI iniciarán su ofensiva. El Ramadán, considerado sagrado  por los musulmanes, conmemora la noche en que el ángel Gabriel se manifestó al profeta Mahoma para revelarle el Corán. Durante este mes, los musulmanes practican el ayuno, las oraciones y los peregrinajes. La señal para el inicio del Ramadán en el año 2024, según el calendario occidental, no solo estará marcada por el avistamiento de la luna creciente en el noveno mes del calendario islámico, sino también por ser la fecha límite que el gobierno israelí espera para la liberación de los secuestrados. Aunque el comité de avistamiento lunar en Arabia Saudita determina oficialmente el inicio del Ramadán, se prevee que su primer día oficial sea el 10 de marzo. Para el mundo árabe y, en particular, para los árabes musulmanes que lideran y militan en Hamás, este período será crucial. Pues la táctica de presión militar implementada por Israel ha logrado cercar a los líderes y milicianos remanentes de Hamás en la ciudad más al sur de Gaza: Rafhá, la única ciudad que aún no ha sido invadida por las tropas terrestres israelíes. Analistas internacionales anticipan que, a pesar de la amenaza a su supervivencia, Hamás no liberará a los rehenes, optando por continuar combatiendo, resguardados entre la población civil palestina, que, como ha sucedido durante la guerra, ha sufrido las peores consecuencias. Mientras tanto, 26 de los 27 países de la Unión Europea han solicitado una pausa humanitaria inmediata que podría ser el preludio de un alto al fuego duradero en Gaza. Por lo tanto, el inicio del Ramadán podría marcar la continuación del conflicto o el comienzo de un periodo de tregua.