46. Agua (I)

Ante el inconsciente - Un pódcast de Marly Kuenerz y Laureano Perez

El agua es nuestro origen: forma nuestro cuerpo y cubre nuestro planeta. Es un elemento universal y la base de nuestra vida. Flexible y moldeable el agua, su adaptabilidad es el vínculo entre las distintas formas de ser del ser humano. El agua es energía pura, a veces mostrada tranquila y ayudadora (ríos, lagos y playas) y otras con una potencia peligrosa (tempestades, olas, tsunamis…) Por este carácter dual y energético, agua e inconsciente son completamente similares. Y es muy habitual que el mar simbolice a lo inconsciente. Igualmente, es el símbolo de lo materno, puesto que en él océano nació la vida. Y en él que confluyen distintas vertientes, que son como los distintos instintos: el sexual, la reflexión, la espiritualidad o la salud. Además, el agua es siempre mediadora en procesos de transformación en la naturaleza, como lo es el inconsciente en los nuestros. Por eso hay que respetar su energía y sus dinámicas sagradas, al igual que a lo inconsciente. Todo ello de acuerdo a ritmos definidos, como las propias olas del mar. Estas ondas no son más que oscilaciones vibrantes de su superficie, y es por ello que vibración y agua están muy ligados. De ahí que la vibración afecte poderosamente a nuestro cuerpo, en gran parte agua. En 2022 parecemos estar en una plena división y la única salida es volver a la unidad. Para ello, tenemos que volver a una dinámica acuática, mas flexible y difusa, menos estanca. Entender diferentes aspectos de la realidad, para unificarlos como si fueran tintas de diferentes colores que se mezclan en el agua con sus flujos. ¡Ánimo para este 2022!